EXPERIMENTOS

MIDIENDO LA VELOCIDAD DE LA LUZ

Un aparato microondas (de los que usamos para calentar la comida) emite ondas electromagnéticas cuya velocidad es aproximadamente la velocidad de la luz.

La ondas electromagnéticas emitidas, rebotan en la pared del microondas creando así una onda estacionaria que al chocar contra las moléculas del alimento en cuestión les comunica energía.

Si usamos unas lonchas de jamón de York, la distancia entre dos puntos más cocinados de dicha loncha, será la mitad de la longitud de onda de la onda electromagnética. 

Como la velocidad de una onda se obtiene multiplicando la longitud de onda de la misma por la frecuencia, tendremos así los dos datos necesarios para calcular dicha velocidad: la longitud de onda - el doble de la distancia entre dos puntos más cocinados (en metros)- y la frecuencia que nos viene dada en las especificaciones técnicas del aparato (en ciclos/seg).

De esta manera hemos obtenido para las ondas electromagnéticas una velocidad de 294000 Km/h, velocidad calculada con bastante buena aproximación  si se tiene en cuenta el error cometido al medir la distancia entre las marcas que quedan en la loncha de jamón de York.